El pasado 9 de mayo, mientras se dirigían a la Ciudad de México luego de un concierto en Tabasco, la agrupación Los Ángeles Azules fue interceptada por un falso retén en la carretera México-Puebla, convirtiéndose en víctima de robo. En el vehículo en el que se transportaban se encontraba todo su equipo de audio e instrumentos, los cuales fueron sustraídos por los delincuentes.
Un día después del asalto, la unidad —una camioneta Mercedes Benz tipo Van con placas LF87217 del Estado de México— fue localizada vacía y abandonada sobre la autopista México-Puebla, a la altura de San Martín Texmelucan, por elementos de la Guardia Nacional.
Luego del hallazgo, la Fiscalía de Puebla abrió una carpeta de investigación y por medio del análisis de cámaras de videovigilancia y recorridos en posibles rutas de escape, las autoridades lograron ubicar los instrumentos musicales y equipo de audio en un camino de terracería de la comunidad de San Rafael Tlanalapan, perteneciente al municipio de San Martín Texmelucan
La Fiscalía estatal informó que los objetos recuperados fueron puestos a disposición del agente del Ministerio Público, mientras continúan las investigaciones para dar con los responsables de este hecho delictivo.
Con información de Informador.mx
En la más reciente reunión con Julio Berdegué, secretario de la SADER, donde estuvieron presentes representantes exportadores de ganado de Sonora, Durango y Coahuila, con el fin de trabajar en conjunto para gestionar el apoyo tanto de los gobiernos estatales como el Federal con créditos que permitan la reconversión del sector, por parte de Chihuahua ningún representante estuvo presente, aunque de hecho hay la especulación de que el presidente de la UGRCh, Álvaro Bustillos, ni siquiera fue invitado.
Con la frontera cerrada a la exportación a EU, los productores están prácticamente obligados a vender a precios de remate, debido a la falta de defensa institucional, lo cual es un golpe directo al bolsillo para miles de familias.
Lo anterior, al parecer, es aprovechado por algunos empresarios, quienes capitalizan la crisis al favorecer el envío de carne procesada al utilizar la entrada de ganado proveniente de Nicaragua para abaratar el nacional.