WASHINGTON (apro).– La ciudadana mexicana María del Rosario Navarro Sánchez es la primera mujer acusada de narcoterrorismo por parte del Departamento de Justicia de Estados Unidos, a quien le achacan los delitos de proveer armas al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
En el encausamiento develado en la Corte Federal del Distrito Oeste de Texas, y difundido por el Departamento de Justicia, a Navarro Sánchez le imputan también los delitos de tráfico de armas, de personas, de lavar dinero y del trasiego de narcóticos a nombre del CJNG.
“Cárteles como el CJNG son grupos terroristas que buscan debilitar a las comunidades estadunidenses y son responsables de la pérdida de incontables vidas en Estados Unidos, México y otros lugares”, indicó Pamela Bondi, la procuradora general de justicia estadunidense.
El gobierno de Donald Trump matiza que el encausamiento judicial en contra de Navarro Sánchez demuestra el compromiso incondicional del Departamento de Justicia de proteger las fronteras estadunidenses y de combatir con todas las herramientas a los narcoterroristas.
De entre las armas que el gobierno de Trump sostiene que Navarro Sánchez entregaba al CJNG resalta las granadas de fragmentación, rifles semiautomáticos y automáticos, municiones de cualquier calibre y pistolas de alto poder.
A Navarro Sánchez, de 39 años, le acuñan el delito de narcoterrorismo consistente en el tráfico de personas indocumentadas a Estados Unidos, esto en cumplimiento con la orden ejecutiva que firmó Trump el 20 de enero del presente año cuando designó como terroristas a los cárteles.
La acusación también le imputa de delitos de conspiración para meter a Estados Unidos a inmigrantes indocumentados, transportar y comprar diversas armas y trasegar substancias controladas a los ciudadanos mexicanos, Gustavo Castro Medina y Luis Carlos Dávalos López.
“Nunca vamos a permitir que las pandillas criminales y cárteles infrinjan terror a las comunidades estadunidenses, se acabaron los días de impunidad de las pandillas y la violencia de los cárteles”, indicó por su parte Kristi Noem, secretaria de Seguridad Interior.
El arresto y cargos contra de Navarro Sánchez y sus secuaces, según el Departamento de Justicia, envía un “mensaje monumental” a los mandos del CJNG y a todos quienes los apoyan, de que Estados Unidos está concentrado en desmantelar a la organización y desaparecerla.
La ciudadana mexicana acusada de narcoterrorismo y de ser cómplice del CJNG, junto con los dos encausados en Texas, fue detenida a la capital mexicana el pasado 4 de mayo, y al momento de su captura le confiscaron armas, dinero y drogas.
Con información de proceso.com.mx