TUXTLA GUTIÉRREZ, Chis. (apro).- Por tercer día consecutivo cientos de estudiantes normalistas de Chiapas y de otros estados, se manifestaron para exigir justicia para Jesús Alaín Vázquez Pérez, de 22 años, el alumno que murió el jueves al caer de una camioneta cuando eran perseguidos por policías estatales.
Los contingentes protestaron en la Fiscalía General del Estado, donde realizaron algunas pintas; al frente llevaban una enorme lona de la Escuela Rural Normal Mactumactzá y cargando una patrulla elaborada de cartón caminaron por el libramiento norte hasta llegar a la plaza central y frente a la sede del poder ejecutivo pintarrajearon e incendiaron la figura de cartón.
“Cuando se nace pobre, estudiar es el mayor acto de rebeldía”, “Jesús vive asesinos”, “estado represor, la Mactu vive”, “Pakales asesinos”, “Jesús vive, la lucha sigue”, son algunas de las consignas que dejaron los normalistas en la fachada del palacio de gobierno.
“Seguimos buscando justicia y la verdad, ya que hasta ahora el gobierno no ha investigado” cómo sucedieron los hechos la noche del jueves. “El gobierno no se ha movilizado ni se tomado la molestia para actuar en esta situación. La Escuela Mactumactzá no ha tenido una respuesta ante el compañero caído”, dijo uno de los alumnos.
Una alumna expresó: “Nos da tristeza y coraje porque nos arrebataron a un compañero que estaba a punto de egresar. Dejó una familia en duelo, amigos llorando, alumnos sin un maestro. Este gobierno nada hace”.
Señaló que “gobiernos van y gobiernos vienen y siempre es lo mismo; hostigamiento y represión contra los estudiantes. Tan fácil que es sentarse para dialogar y ver cuáles son las necesidades de los estudiantes. Por eso salimos a exigir nuestros derechos porque el gobierno no resuelve. ¿Cuál es la necesidad de hostigarnos, atacarnos y reprimirnos? Nosotros buscamos un sueño: ser maestros”.
Los normalistas afirman que su compañero que cursaba el octavo semestre, cayó de la góndola de la camioneta debido a que presuntamente recibió el impacto de un objeto no determinado en la cabeza, lo que provocó que se desplomara y se impactara contra el pavimento.
El día de los hechos, el titular de la Secretaría de Seguridad del Pueblo, Oscar Alberto Aparicio Avendaño, dijo que el estudiante murió en “un accidente, cayó de una camioneta en la que junto con otros de sus compañeros llevaban retenidos a dos elementos de la policía”, luego de que la policía había frustrado que otro grupo de normalistas se apoderara de un autobús de pasajeros en otro punto de la capital.
Los normalistas atacaron con palos un puesto de la policía, de donde se llevaron retenidos a dos uniformados.
Con información de Proceso.