WASHINGTON (AP) — Un tribunal federal de comercio le prohibió el miércoles al presidente Donald Trump imponer amplios aranceles generalizados al amparo de una ley de poderes de emergencia.
El fallo de un panel de tres jueces se produjo después de que se interpusieron varias demandas en las que se argumenta que Trump ha excedido su autoridad, dejando la política comercial de Estados Unidos dependiente de sus caprichos y desatando el caos económico.
Hay al menos siete demandas en las que se impugnan los gravámenes, el pilar central de la política comercial de Trump.
Típicamente, los aranceles deben recibir la aprobación del Congreso, pero Trump afirma que tiene la autoridad para actuar debido a que los déficits comerciales del país equivalen a una emergencia nacional. En cierto momento impuso aranceles a la mayoría de los países del mundo, haciendo tambalear los mercados.
Los demandantes argumentan que la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional de 1977 (IEPPA) no autoriza el uso de aranceles.
Incluso si lo hiciera, afirman, el déficit comercial no cumple con el requisito de la ley de que sólo por una "amenaza inusual y extraordinaria" puede desencadenar una emergencia. Estados Unidos ha tenido un déficit comercial con el resto del mundo durante 49 años consecutivos.
Con información de: Proceso.
En la más reciente reunión con Julio Berdegué, secretario de la SADER, donde estuvieron presentes representantes exportadores de ganado de Sonora, Durango y Coahuila, con el fin de trabajar en conjunto para gestionar el apoyo tanto de los gobiernos estatales como el Federal con créditos que permitan la reconversión del sector, por parte de Chihuahua ningún representante estuvo presente, aunque de hecho hay la especulación de que el presidente de la UGRCh, Álvaro Bustillos, ni siquiera fue invitado.
Con la frontera cerrada a la exportación a EU, los productores están prácticamente obligados a vender a precios de remate, debido a la falta de defensa institucional, lo cual es un golpe directo al bolsillo para miles de familias.
Lo anterior, al parecer, es aprovechado por algunos empresarios, quienes capitalizan la crisis al favorecer el envío de carne procesada al utilizar la entrada de ganado proveniente de Nicaragua para abaratar el nacional.