El Servicio de Administración Tributaria (SAT) ha intensificado la supervisión de las operaciones financieras realizadas por los contribuyentes en México, incluyendo aquellas llevadas a cabo mediante tarjetas de crédito de tiendas departamentales como Liverpool, Coppel o Suburbia. Aunque estos instrumentos no pertenecen a entidades bancarias tradicionales, sus movimientos también son monitoreados por las autoridades fiscales debido a su creciente popularidad entre los consumidores.
Las tarjetas de tiendas también están bajo la lupa del SAT
Estas tarjetas, pese a no estar vinculadas directamente a cuentas bancarias, generan registros de consumo que pueden ser contrastados con los ingresos reportados ante el SAT. Si se detectan inconsistencias entre el dinero que se declara y los gastos realizados, el organismo fiscal tiene la facultad de iniciar procesos de revisión o auditoría, que podrían derivar en multas o sanciones adicionales.
La finalidad de esta vigilancia es asegurar que todos los contribuyentes cumplan correctamente con sus obligaciones fiscales, y prevenir el ocultamiento de ingresos. Por esta razón, el SAT ha emitido recomendaciones claras sobre lo que no se debe hacer al utilizar este tipo de tarjetas.
Errores que debes evitar al usar tarjetas de Coppel o Liverpool
Uno de los principales señalamientos de la autoridad hacendaria es no realizar gastos que excedan los ingresos declarados. Por ejemplo, si una persona informa ganar 10 mil pesos al mes, pero se identifica que sus consumos con tarjeta ascienden a 25 mil pesos en ese mismo periodo, se puede suponer la existencia de ingresos no reportados.
También se considera riesgoso prestar la tarjeta departamental a familiares o amigos, ya que todas las operaciones quedan registradas bajo el nombre del titular del crédito. Aunque la compra no sea realizada por el dueño de la tarjeta, el SAT puede exigir la justificación de ese gasto si observa que no guarda relación con los ingresos declarados por esa persona.
¿Qué consecuencias puede haber por discrepancias fiscales?
Cuando se encuentran diferencias entre lo que una persona declara como ingreso y lo que gasta (ya sea con tarjetas bancarias o de tiendas), el SAT puede concluir que existe un ingreso no documentado. En estos casos, se solicitará al contribuyente que demuestre con pruebas el origen del dinero utilizado en esas compras.
Si no se logra justificar de forma válida y legal el recurso empleado, el SAT está facultado para aplicar multas que van del 15% al 70% del monto no acreditado, además de recargos y actualizaciones estipulados por la Ley del Impuesto Sobre la Renta (ISR) y el Código Fiscal de la Federación.
En situaciones más delicadas, cuando se presume la intención de evadir impuestos, incluso se puede tipificar el caso como defraudación fiscal, lo que puede derivar en acciones penales.
Cómo evitar problemas fiscales
Para reducir el riesgo de sanciones o auditorías, lo más recomendable es mantener una contabilidad ordenada y declarar con precisión todos los ingresos percibidos. Además, es fundamental no usar tarjetas departamentales para efectuar gastos que no puedas justificar, y evitar el uso compartido con terceros.
Conocer estas reglas permite a los contribuyentes actuar de forma informada y prevenir conflictos con el SAT, así como proteger su estabilidad financiera y legal.
Con información de Informador.mx