El consumo de fentanilo en la frontera norte del país creció en los últimos dos años entre 15% y 20%, según estimaciones de un centro de rehabilitación para adictos de Sonora.
Su uso mezclado con otras drogas sintéticas ha escalado, pero todavía falta para llegar a la situación que se vive en Estados Unidos, consideró un integrante de la asociación civil de San Luis Río Colorado, que solicitó el anonimato debido a la situación de violencia en la localidad fronteriza por la guerra entre Los Mayos y Los Chapitos, fracciones del Cártel de Sinaloa.
Aseguró que con sus recursos hacen un gran esfuerzo para prevenir el consumo de fentanilo y de otras drogas en la frontera norte, ya que el gobierno federal va lento en esta tarea, que está dejando a la asistencia pública: “Le falta para llegar a los números como en Estados Unidos, todavía no se llega a esos extremos”.
"Ha escalado entre 15% y 20% el consumo de hace dos años para acá", afirmó en la sede del centro en el que desde hace más de 20 años atienden a personas adictas a drogas o alcohol.
"Lo que se busca es la prevención, nada más que el gobierno está muy lento. Toda la chamba no la adjudica a nosotros, a la asistencia pública, y nosotros hacemos nuestra chamba, buscamos nuestros recursos, el apoyo de las familias, apoyo de por aquí y de por allá. Aquí hay que sacar adelante a 70 personas, que es la capacidad que tiene el centro", comentó la fuente.
Explicó que jóvenes y adultos de San Luis Río Colorado consumen el fentanilo que se queda en la localidad y que no pasa a Estados Unidos, el cual es mezclado con otras drogas como metanfetamina, heroína, anfetaminas y cristal.
"Es poca la gente que llega aquí diciendo que consumió fentanilo, pero muchos no se dan cuenta que lo consumen porque viene mezclado con cristal, heroína, metanfetamina. Nosotros nos dedicamos a dar tratamientos y ahorita la situación en San Luis Río Colorado está caliente y preferimos llevar la fiesta en paz", indicó.
Mexicali es ya la ciudad de Baja California con el mayor consumo de fentanilo, desplazando a Tijuana, según los datos del director del Servicio Médico Forense de Baja California, César Raúl González Vaca.
"Aquí en Mexicali, 50% de los cuerpos nos sale positivo a alguna droga de abuso, como marihuana, anfetamina, metanfetaminas, cocaína y benzodiacepina más fentanilo, la mitad de los cuerpos, y el fentanilo, igualmente aquí en Mexicali, anda alrededor de 20%, que ya es alto", refirió.
Expuso que en Tijuana es más alto el porcentaje de los cuerpos que salen positivos a casi todas las drogas, que es cercano a 59%, pero en el caso del fentanilo es menor.
Esto puede obedecer a dos factores, que el farmacodependiente sea "usuario de varias drogas o que la persona haya consumido una droga y que no sepa lo que contiene", detalló a este diario.
"Estos números nos hablan de que sí hay presencia, que sí está en las calles, se está consumiendo no sabemos si de una manera involuntaria o voluntaria porque no sabemos si las personas quieran usar el fentanilo", agregó.
Lourdes Angulo Corral, cofundadora de Integración Social Verter, una asociación civil que brinda espacio seguro a los consumidores de drogas inyectadas para evitar muertes por sobredosis, afirmó que el fentanilo es un problema que está afectando a las ciudades fronterizas como Mexicali, donde se consume fentanilo mezclado con heroína.
"A partir de 2019 empezamos a hacer pruebas con tiras rápidas y a detectar el fentanilo en muestras de heroína. Hasta la fecha es la sustancia donde hemos encontrado el fentanilo", advirtió.
En ese momento, 2019, "prácticamente de 10 pruebas que hacíamos, cuatro salían positivas a fentanilo y de ahí fue aumentando. Al siguiente año, ya era 50% y en este momento 100% de las sustancias opioides que analizamos salen positivas a fentanilo", subrayó.
Angulo Corral alertó: "Casi todas las personas que consumen opioides en Mexicali lo hacen mezclado con fentanilo. La situación va en aumento y grave porque no se está atendiendo a nivel gubernamental. Hay más prioridad de tener esa narrativa de que no se consume en México, aquí no se produce y se consume, que realmente atender".
Explicó que desde finales de 2018 se comenzó a detectar el consumo de fentanilo en las ciudades fronterizas de Baja California, mezclado con heroína y metanfetamina.
"Es un tema que el gobierno federal quiere negar el consumo, quizá no sea en todo el país, pero un consumo alto de opioides inyectados lo vamos a encontrar principalmente en las ciudades fronterizas como Tijuana, Mexicali, San Luis Río Colorado, Nogales, Ciudad Juárez y otras localidades como Hermosillo, que aunque no son fronterizas tienen experiencia hablando del consumo de estas sustancias", apuntó la especialista.
Con información del Informador.mx