
- “Al final la pagan los consumidores y las empresas”.
El senador del PAN por Chihuahua, Mario Vázquez advirtió que la decisión del Ejecutivo de enviar al Congreso una minuta arancelaria sin diagnóstico técnico ni claridad estratégica es preocupante. “En principio, resulta sospechoso”, señaló, al cuestionar que la medida incluso podría responder a presiones comerciales de Estados Unidos respecto a productos chinos.
El legislador por Chihuahua explicó que los aranceles a importaciones —si bien pueden proteger sectores productivos y empleos— quienes pagan al final son los consumidores y las empresas. “Generan ingresos adicionales para el Estado y la finalidad no está claramente definida. No hay claridad. Se fortalece la recaudación, pero no sabemos para qué ni cómo se usarán esos recursos”, advirtió.
Mario Vázquez agregó que México requiere fortalecer cadenas productivas, impulsar capacitación y sustituir importaciones estratégicas, pero insistió: “no hay diagnóstico. No hay estrategia. Se está legislando a ciegas”.
El legislador explicó que la minuta enviada por el Ejecutivo no constituye una política industrial. Es únicamente una reorganización de aranceles —cosméticos, juguetes, textiles, electrodomésticos, acero y autopartes— sin justificación ni evaluación de impacto.
“El propio dictamen reconoce que no hay información suficiente sobre volúmenes, precios o impactos sectoriales. ¿Cómo se supone que el Senado debe decidir? El Congreso se ha convertido en una oficialía de partes”, expuso.
Asimismo, advirtió que los aranceles no son elementos administrativos:
“Son herramientas de poder económico: alteran precios, reconfiguran cadenas productivas y pueden impactar empleo, inflación y competitividad”.
Detalló que la minuta no incluyó un análisis sobre:
• Impacto inflacionario,
• Efectos en PYMES y consumidores,
• Consecuencias para cadenas de valor,
• Impactos regionales,
• Compatibilidad con el T-MEC.
El senador puntualizó que los incrementos arancelarios coinciden con nuevas medidas restrictivas de Estados Unidos hacia manufacturas chinas.
“La pregunta es incómoda, pero necesaria: ¿esta es una estrategia propia… o es un reflejo de Washington? México no debe legislar por presión externa”.
El legislador alertó que aprobar aranceles sin parámetros transparentes abre espacio para prácticas de riesgo en aduanas:
• Manipulación de clasificación,
• Subvaluación,
• Cupos discrecionales,
• Trato preferencial,
• Contrabando técnico,
• La corrupción estructural.
“Sin controles, lo que realmente se aprueba es discrecionalidad para quien maneja la aduana”, afirmó.
El senador planteó que México necesita una estrategia integral basada en:
• Diagnóstico público de impacto inflacionario,
• Evaluación sectorial rigurosa,
• Consulta con industria, PYMES y consumidores,
• Coordinación con política industrial, logística y energética,
• Transparencia total y blindaje anticorrupción.
“México necesita claridad, evidencia y estrategia. Esto no lo tiene.”
“El comercio exterior es el sistema circulatorio de nuestra economía. No se legisla a ciegas, no se legisla por reflejo, no se legisla por presión. México merece estrategia, técnica y certidumbre. No una tabla improvisada”, concluyó.