
EFE.- Unas 21 millones de jóvenes de entre los 15 y 19 años quedan embarazadas en países en desarrollo, y al menos la mitad de ellas de forma no intencionada, un fenómeno que la Organización Mundial de la Salud (OMS) busca reducir con una nueva guía de actuación presentada este miércoles.
La guía incluye entre otros aspectos recomendaciones para reducir o incluso prohibir el matrimonio infantil, aumentar la escolarización y mejorar el acceso a anticonceptivos y atención sanitaria en materia reproductiva.
"Los embarazos adolescentes pueden crear ciclos de pobreza para varias generaciones que son difíciles de romper, y presentar riesgos para la salud, con tasas relativamente altas de infecciones, partos prematuros y complicaciones en abortos practicados de forma no segura", advirtió la OMS en un comunicado.
Las desigualdades de género, la pobreza y la falta de oportunidades, así como la dificultad de acceso a redes de salud sexual y reproductiva, están a menudo detrás de estos embarazos adolescentes, que ya podrían reducirse hasta en dos tercios, calcula la OMS, si todas las jóvenes finalizaran la enseñanza secundaria.
La agencia sanitaria de la ONU indica que a principios de siglo una de cada 15 jóvenes (un 6,6 %) habían dado a luz antes de los 10 años, una proporción que actualmente ha bajado a una de cada 25 (el 4%), aunque en algunos países de bajas rentas todavía ronda el 10%.
Con información de Latinus

Este martes se reunieron en privado los senadores de Morena, con el titular de la Comisión Nacional del Agua, Efraín Morales, previo a la votación de la reforma a la Ley de Aguas Nacionales que se someterá a votación este miércoles.
El senador Juan Carlos Loera confirmó que esta reunión es “para analizar la Ley de Aguas Nacionales, con la cual se busca frenar el mercado negro y la sobreexplotación de este recurso".
Aseguran que se legislará sin afectar derechos, pero poniendo límites a los abusos, a la corrupción y al acaparamiento del agua.

Bien dicen que el que calla otorga, y en esta ocasión quien evitó dar declaraciones sobre la causa de la salida de Alejandro Gertz Manero de la FGR que se calificó como “grave”, fue la presidenta Claudia Sheinbaum.
Pues al ser cuestionada por una reportera durante la rueda de prensa matutina, la mandataria nacional evadió la pregunta y dijo que se reconoce el trabajo del ex fiscal, “lo importante es el reconocimiento a su trabajo y que él acepta irse a una embajada, ahora está Ernestina Godoy de interina y el proceso que se va a llevar a cabo en el senado… creo yo que es importante, manteniendo la la autonomía de la fiscalía que es fundamental, fortalecer la coordinación”, se limitó a decir.
Pese a esta nula respuesta, la periodista reformuló la pregunta en vano y mencionó la carta enviada por parte del Senado, a lo que Sheinbaum respondió que se trata de “otra cosa”, la razón de la salida de Gertz, “eso es otra cosa, lo importante es que hoy estamos en esta circunstancia y vamos a seguir hacía adelante”, sentenció.

La tensión política en torno a la reforma a la Ley de Aguas Nacionales escaló luego de un intercambio directo entre el senador de Morena, Juan Carlos Loera, y el director general de la Junta Central de Agua y Saneamiento de Chihuahua, Mario Mata.
El desencuentro surgió en un chat donde Loera señaló a Mata como parte de un “grupo violento” y lo acusó de recurrir a agresiones físicas ante la falta de argumentos. Mata respondió de inmediato, rechazando categóricamente las acusaciones y negando haber agredido o mandado agredir a alguien.
“No sé a qué te refieres, estimado Juan Carlos. Nunca he agredido a nadie ni mandado agredir. Acepto tu reto y pon el lugar y la fecha”, escribió Mata, quien además exigió aclaraciones frente a lo que calificó como señalamientos infundados.
El intercambio terminó convirtiéndose en un reto público a debatir, aunque ninguno de los dos ha anunciado hasta ahora la fecha, el formato o el lugar donde podría realizarse el encuentro.
La discusión se da en medio del creciente debate nacional sobre la reforma a la Ley de Aguas Nacionales, un tema que ha encendido fricciones entre distintos actores políticos y sectores productivos, especialmente en Chihuahua, entidad históricamente marcada por disputas sobre uso y control del agua.

