EFE.- Cientos de personas se manifestaron este domingo en varias ciudades de España contra el "turismo masivo", un modelo que, según denuncian, "expulsa" a los vecinos de los barrios y dispara el precio de la vivienda.
Las consignas a favor de la vivienda como un derecho y en contra del "turismo masivo" se alternaron en una manifestación en San Sebastián (norte), en la que alrededor de medio millar de personas rechazaron el modelo turístico actual y urbanístico de una ciudad que, según destacaron, se halla "en emergencia habitacional".
A la marcha se sumaron 48 asociaciones, sindicatos y colectivos ciudadanos que consideran que la falta y la carestía de la vivienda en esa ciudad vasca están directamente relacionadas con una industria turística "fuera de control".
La portavoz de la plataforma convocante, Eihar Egaña, dijo a los periodistas que este "es un problema transversal" que afecta a muchos lugares en el mundo incluidas ciudades como Venecia, Lisboa y Barcelona que, como San Sebastián, han respondido al llamamiento realizado por la red SET del Sur de Europa frente a la "turistificación".
Precisamente en Barcelona, unas 600 personas, según la Guardia Urbana, se manifestaron hoy para protestar contra el "turismo masivo", convocados por la Asamblea de Barrios por el Decrecimiento Turístico.
La protesta se convirtió en un "clamor" contra el reciente anuncio del proyecto de ampliación del aeropuerto barcelonés de "El Prat" impulsado por el gobierno regional de Cataluña y el que muchos sectores consideran que "favorecerá" la llegada aún más "masiva" de turistas.
Durante la protesta, los manifestantes exhibieron carteles con lemas como "el turismo nos roba" o "un turista más, un vecino menos".
También en otra ciudad muy turística, Granada, en el sur de España, protestaron este domingo contra una estructura de turismo que calificaron de "depredador" y exigen medidas para que no se "expulse" a los vecinos del barrio.
El Albaicín, barrio granadino declarado "Patrimonio de la Humanidad" junto con el conjunto palaciego de la Alhambra y los jardines del Generalife, dedica una de cada cuatro de sus viviendas a uso turístico, cifras que la plataforma que organizó la protesta presentó como ejemplo de la "turistificación de un barrio que quiere mantener su esencia".
También se convocó una manifestación en Palma, la capital de las Islas Baleares (Mediterráneo) y es una de las primeras ciudades españolas donde se movilizaron contra el "turismo masivo", ya que provocó una importante escasez de viviendas para sus ciudadanos y las personas que se desplazan allí para trabajar, debido al uso que se hace de ellas para los visitantes.
España recibió en 2024 un total de 94 millones de extranjeros y en los primeros cuatro meses del año la cifra llegó 25.6 millones, un 7.1% más que en el mismo lapso del 2024.
Las organizaciones que protestan contra lo que consideran como un turismo masivo afirman que el "uso de viviendas para uso turístico" hace que muchas de ellas salgan del "mercado tradicional", lo que hace que su precio aumente para los residentes.
Con información de Latinus.