Tacámbaro, Michoacán, 11/07/25 (Más).- A menos de 24 horas de haber asumido el cargo como nuevo presidente municipal de Tacámbaro, Michoacán, Alejandro Fuerte García reconoció públicamente que teme por su vida, en un contexto de tensión y violencia que persiste tras el asesinato de su antecesor, Salvador Bastida García.
En sus primeras declaraciones como alcalde, Fuerte García indicó que considera solicitar protección a las autoridades por la situación de inseguridad en la región, aunque aseguró que el municipio “está muy tranquilo”.
Durante su presentación oficial ante medios de comunicación, expresó: “Lo más seguro es que sí (solicitará protección) por la situación, y la verdad está muy tranquilo Tacámbaro. Como ser humano, yo creo que todos tendríamos miedo, pero tenemos las ganas de hacer algo por nuestro municipio y echarle ganas”.
El nuevo edil, quien antes se desempeñó como director de Protección Civil municipal, afirmó que una de sus prioridades será coordinarse con autoridades estatales y federales en materia de seguridad, en un intento por garantizar la estabilidad del municipio luego del homicidio del exalcalde y su escolta.
La presentación del alcalde ante los medios no estuvo exenta de incidentes. Durante el evento, miembros de su equipo impidieron que reporteros se acercaran a entrevistarlo, lo que derivó en un altercado y la caída de una comunicadora. Minutos después, Fuerte García accedió a responder preguntas, ya acompañado del diputado del Partido del Trabajo (PT), Vicente Gómez Núñez.
En sus declaraciones, el edil sostuvo que, pese al asesinato del exalcalde, el ayuntamiento se mantiene operativo y que no se han detenido las funciones municipales. “Todo está trabajando muy bien, están trabajando todas las empresas. No ha habido ningún detalle, no se ha detenido en nada la economía”, aseguró.
Fuerte García negó que existan grupos criminales operando en Tacámbaro, así como reportes de cobros de cuota a empresarios locales. No obstante, manifestó su compromiso de mejorar la percepción de seguridad entre los habitantes y de impulsar el turismo como una línea de desarrollo en su administración.
Al ser cuestionado sobre la posible reincorporación de funcionarios separados del cargo, como el extesorero Raudel Campos Murillo, quien fue acusado de delitos sexuales, evitó dar una respuesta concreta.
El edil afirmó contar con el respaldo del cabildo y de las autoridades auxiliares. “Estamos unidos, todo el cabildo y los jefes de tenencia me acompañaron. Vamos a trabajar”, señaló en su mensaje.
El contexto en que Alejandro Fuerte García asume el cargo está marcado por el asesinato de su antecesor, Salvador Bastida García, ocurrido la noche del 5 de junio. Bastida viajaba en una camioneta acompañado de su escolta, cuando ambos fueron atacados a balazos luego de haber cenado en una taquería del centro del municipio.
Días después, la Fiscalía General del Estado (FGE) de Michoacán informó sobre la captura de Santos Moreno N, alias ‘El Kiko’, como presunto autor del homicidio. Las investigaciones establecieron que el señalado mantenía una relación cercana con Bastida y estaba con él al momento del ataque. Según la FGE, tras cometer el crimen, Santos Moreno se apoderó de una bolsa con 200 mil pesos, propiedad del exalcalde, y huyó del lugar.
La fiscalía había ofrecido una recompensa de 100 mil pesos a quien proporcionara información útil para la localización del presunto responsable. La detención fue confirmada semanas después, aunque no se ha revelado públicamente si hubo participación de más personas en los hechos.
Tacámbaro enfrenta una crisis de gobernabilidad derivada del asesinato del anterior edil, sumada a los desafíos estructurales que implican el relevo de autoridades en un contexto de inseguridad. La administración de Alejandro Fuerte inicia bajo vigilancia pública, con retos inmediatos en materia de seguridad, transparencia y recuperación de la confianza ciudadana.