TUXTLA GUTIÉRREZ, Chis. (apro).- Una mujer originaria de Honduras, que cumplía una condena de 40 años por el delito de homicidio, falleció el domingo en el penal de San Cristóbal de las Casas, presuntamente por falta de atención médica tras sufrir un ataque de asma.
La organización feminista Colectiva Cereza denunció que la mujer no recibió la atención médica oportuna por parte de las autoridades penitenciarias, lo que habría derivado en su muerte. A través de un comunicado, la agrupación señaló que este caso refleja las condiciones precarias de salud y la negligencia institucional dentro del sistema carcelario.
“La criminalización, la discriminación por origen nacional y la falta de acceso a servicios básicos como la salud, son parte de las múltiples violencias que viven las mujeres privadas de libertad”, manifestó la Colectiva.
Explicó que el domingo por la mañana, “Génesis se sintió mal y fue a la enfermería, pero no le dieron la atención adecuada, ya que no había medicamentos y sólo estaba una enfermera que no pudo valorar la urgencia y el alto riesgo de un ataque del asma crónico que padecía”.
La organización feminista, dedicada a acompañar legal y emocionalmente a mujeres en prisión, señaló que Génesis dejó de existir durante la tarde “por un paro cardio respiratorio; las custodias que tardaron en llegar, no hicieron varios avisos, pero no se mandan solas, hay alcaide y director responsables de la atención directa y del resguardo a las personas que se hayan bajo su custodia”.
Hace un año y medio, refirió la colectiva. la hondureña fue trasladada “ilegalmente” del penal de El Amate, en el municipio de Cintalapa, al de San Cristóbal de las Casas y el frío de la zona en la que está la cárcel -a más de 2 mil metros de altura- le afectó mucho, pero “si la hubieran atendido a tiempo no habría muerto”.
En El Amate “no había tenido este problema de salud tan grave” que estaba padeciendo, por lo que había insistido a las autoridades penitenciarias que la regresaran a la prisión anterior.
De acuerdo a la Colectiva, “la trasladaron de El Amate a San Cristóbal porque según la autoridad, lo autorizó un juez de control cuando ya tenía sentencia condenatoria y era el juez de ejecución el que debía autorizarlo”.
Afirmó que “ya estaba su causa junto a la de otra compañera en el juzgado de ejecución de San Cristóbal, pero el clima de los Altos de Chiapas, por el frío y la lluvia, le perjudicó mucho a Génesis empeorando su asma crónica; necesitaba un nebulizador que no se le proporcionó en el reclusorio como era su obligación, sino que ella con su trabajo adentro haciendo monederos y bolsas se lo compraba”.
La aseguró que Génesis, de aproximadamente 40 años, era una mujer amable y solidaria con sus compañeras y “si hubiera tenido otras condiciones en su vida no hubiera llegado a prisión”.
Informó que el cuerpo de la hondureña quedó a disposición de la Fiscalía Zona Altos para que se realicen la necropsia y otros peritajes, al tiempo que se abrió una carpeta de investigación; también quedó la camioneta del penal en la que llevaron a Génesis al hospital ya demasiado tarde.
La agrupación feminista, dijo que la necropsia confirmará la causa de su muerte, “pero es lógico que sea por la crisis de asma. Las compañeras dicen que estaba morada. Una crisis asmática es muy grave y requiere la aplicación inmediata de varios medicamentos por nebulizador”.
Cereza finalmente comentó que está intentando localizar a su familia en Honduras porque no sabe qué se hará con el cadáver, “pero el Estado tiene la responsabilidad de hacerse cargo de la inhumación o repatriación”.
Con información de proceso.com.mx