Transferir dinero entre tus propias cuentas bancarias es una práctica común, ya sea para administrar mejor tus finanzas, pagar una tarjeta de crédito, mover fondos entre cuentas de ahorro y cheques, o simplemente por comodidad. Sin embargo, en México es normal preguntarse si este tipo de movimientos pueden llamar la atención del Servicio de Administración Tributaria (SAT), especialmente en el contexto del monitoreo de depósitos y transferencias.
¿El SAT puede revisar mis transferencias entre cuentas propias?
Sí. El SAT tiene la facultad de solicitar información sobre movimientos financieros que superen ciertos montos o que parezcan inusuales, aunque no todas las operaciones se reportan automáticamente. De acuerdo con las disposiciones fiscales, los bancos están obligados a informar al SAT sobre depósitos en efectivo mayores a 15 mil pesos mensuales, pero no necesariamente sobre transferencias electrónicas entre cuentas del mismo titular.
Es decir, si transfieres dinero entre tus propias cuentas a través de SPEI, cheques o traspasos, en principio no estás cometiendo ninguna irregularidad, ni existe una obligación fiscal adicional solo por este hecho, siempre y cuando puedas justificar el origen y destino del dinero.
¿Es necesario reportar las transferencias propias al SAT?
No. Si el dinero proviene de ingresos ya declarados o está debidamente justificado (por ejemplo, tu salario, ahorro personal o ingresos previamente facturados), no hay necesidad de reportarlo. No obstante, es recomendable conservar comprobantes o registros de esas transferencias, ya que, en caso de una revisión, podrías necesitar demostrar que se trata de recursos lícitos y tuyos.
¿Qué debo cuidar al transferir entre mis cuentas?
Aunque transferencias entre cuentas propias no representan un problema legal por sí mismas, hay algunas recomendaciones clave:
¿Cuándo sí puede haber implicaciones fiscales?
Hay ciertas situaciones donde las transferencias entre cuentas pueden generar atención por parte del SAT:
Mover dinero entre tus propias cuentas bancarias es legal y no debería causarte problemas con el SAT si el origen de los recursos es claro y lícito. La clave está en la transparencia y la documentación adecuada. Para evitar malentendidos o problemas durante una revisión fiscal, es recomendable mantener un buen control de tus movimientos financieros y, en caso de duda, consultar con un contador o asesor fiscal.
Tomado de Informador.mx
Con información del SAT