CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Una ballena jorobada fue rescatada y liberada en Bahía de los Ángeles, Baja California, por la Secretaría de Marina (Semar) en colaboración de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca).
Tras recibir una alerta por una organización civil sobre una ballena enmallada en redes de pesca, personal naval desplegó una unidad de superficie tipo patrulla interceptora con integrantes del Grupo de Inspección y Verificación, especializado en rescate marino.
El ejemplar cetáceo, identificado en etapa juvenil y con una longitud aproximada de 12 metros, fue liberado sin registrar lesiones graves para retomar su curso migratorio en aguas del Golfo de California. Además, fueron recuperados 600 metros de red y un ejemplar de totoaba que se encontraba enmallado en estado de descomposición.
La ballena jorobada, también conocida como ballena yubarta, es una especie de cetáceo misticeto, caracterizados por ser mamíferos carnívoros que tienen barbas en lugar de dientes, y pueden vivir alrededor de 80 años. De las 11 especies de ballenas registradas existentes, esta es catalogada como la quinta más grande por sus aletas pectorales que pueden medir hasta cinco metros.
La ballena jorobada fue una especie que se encontraba en peligro de extinción, pero desde 1966 la Comisión Ballenera Internacional (CBI) prohibió su caza, lo que ayudó a la reproducción de más ejemplares tomando medidas de protección y conservación.
En México, las ballenas jorobadas pueden encontrarse en el Pacífico en los meses de noviembre a mayo, aunque existen algunas que permanecen todo el año en el Golfo de California.
Dicha especie está sujeta a protección especial en el país, con base a la Norma Oficial Mexicana 059 que se publicó el 30 de diciembre de 2010 en el Diario Oficial de la Federación.
Por otra parte, la totoaba, llamada habitualmente como corvina blanca, curvina, roncador o tambor por su vejiga natatoria capaz de producir sonidos, es considerada como la especie más grande del Alto Golfo de California y puede vivir hasta por 50 años.
Desde el siglo pasado, la especie ha sido sobreexplotada y fue hasta 1940 que se comenzaron a implementar medidas para su protección. Sin embargo, el número de ejemplares sigue disminuyendo a causa de la pesca ilegal, donde trafican la especie al continente asiático y ofrecen en precios sumamente elevados su vejiga, o también conocida como buche, por sus supuestas propiedades medicinales y afrodisíacas.
En 1991, la especie fue declarada oficialmente en peligro de extinción y actualmente también se encuentra en la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
Con información de: Proceso.