
EFE.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pidió al Pentágono que prepare varios planes para su idea de retomar el control del Canal de Panamá, según informó este jueves la cadena NBC.
Entre los planes que baraja el Comando Sur estarían el envío de tropas estadounidenses en coordinación con las autoridades panameñas, o la opción más drástica del uso de la fuerza.
Según NBC, que cita a dos funcionarios estadounidenses conocedores de los planes, todo depende de la cooperación que los militares panameños acuerden tener con Washington.
Trump ha repetido en múltiples ocasiones en las últimas semanas su interés de retomar el control del Canal de Panamá, que asegura ha caído en manos chinas, algo que la nación centroamericana niega.
La última vez fue durante su discurso ante el Congreso la semana pasada, cuando aseguró que Estados Unidos "recuperará" esa infraestructura.
Además, Trump ha criticado los peajes que cobra el canal a sus buques por cruzarlo, que son calculados con base a tratados internacionales sin distinción de banderas.
La visita a principios de febrero del secretario Marco Rubio a Panamá, la primera parada de su gira por Centroamérica y República Dominicana, parecía haber rebajado las tensiones después de que el gobierno panameño se comprometió a no renovar un acuerdo comercial con China sobre la Ruta de la Seda —lo que provocó la protesta de Beijing— y el Canal anunció que trabajaría con la Marina estadounidense para "optimizar la prioridad" de sus buques.
Con información de Latinus

Este martes se reunieron en privado los senadores de Morena, con el titular de la Comisión Nacional del Agua, Efraín Morales, previo a la votación de la reforma a la Ley de Aguas Nacionales que se someterá a votación este miércoles.
El senador Juan Carlos Loera confirmó que esta reunión es “para analizar la Ley de Aguas Nacionales, con la cual se busca frenar el mercado negro y la sobreexplotación de este recurso".
Aseguran que se legislará sin afectar derechos, pero poniendo límites a los abusos, a la corrupción y al acaparamiento del agua.

Bien dicen que el que calla otorga, y en esta ocasión quien evitó dar declaraciones sobre la causa de la salida de Alejandro Gertz Manero de la FGR que se calificó como “grave”, fue la presidenta Claudia Sheinbaum.
Pues al ser cuestionada por una reportera durante la rueda de prensa matutina, la mandataria nacional evadió la pregunta y dijo que se reconoce el trabajo del ex fiscal, “lo importante es el reconocimiento a su trabajo y que él acepta irse a una embajada, ahora está Ernestina Godoy de interina y el proceso que se va a llevar a cabo en el senado… creo yo que es importante, manteniendo la la autonomía de la fiscalía que es fundamental, fortalecer la coordinación”, se limitó a decir.
Pese a esta nula respuesta, la periodista reformuló la pregunta en vano y mencionó la carta enviada por parte del Senado, a lo que Sheinbaum respondió que se trata de “otra cosa”, la razón de la salida de Gertz, “eso es otra cosa, lo importante es que hoy estamos en esta circunstancia y vamos a seguir hacía adelante”, sentenció.

La tensión política en torno a la reforma a la Ley de Aguas Nacionales escaló luego de un intercambio directo entre el senador de Morena, Juan Carlos Loera, y el director general de la Junta Central de Agua y Saneamiento de Chihuahua, Mario Mata.
El desencuentro surgió en un chat donde Loera señaló a Mata como parte de un “grupo violento” y lo acusó de recurrir a agresiones físicas ante la falta de argumentos. Mata respondió de inmediato, rechazando categóricamente las acusaciones y negando haber agredido o mandado agredir a alguien.
“No sé a qué te refieres, estimado Juan Carlos. Nunca he agredido a nadie ni mandado agredir. Acepto tu reto y pon el lugar y la fecha”, escribió Mata, quien además exigió aclaraciones frente a lo que calificó como señalamientos infundados.
El intercambio terminó convirtiéndose en un reto público a debatir, aunque ninguno de los dos ha anunciado hasta ahora la fecha, el formato o el lugar donde podría realizarse el encuentro.
La discusión se da en medio del creciente debate nacional sobre la reforma a la Ley de Aguas Nacionales, un tema que ha encendido fricciones entre distintos actores políticos y sectores productivos, especialmente en Chihuahua, entidad históricamente marcada por disputas sobre uso y control del agua.

